Azul es el humo del mago
el aire
el frío
y el seat seiscientos de la esquina
que se fue a Madrid y no volvió hasta que no se puso
Azul,
La tarde.
Azul como son azules mis labios en invierno
efímero azul de nieve
porque me besas
últimamente
con cualquier pretexto
Azul como tus párpados de noche
que me hablan de vuelos,
de los jet lags de las pestañas.
Azules las estrellas camufladas
de la noche americana
y los satélites del agua.
Azul la nostalgia de todos los días
del púrpura de tu ropa,
de su olor
que se aferra a mi garganta…
Azul el fondo de tu piel,
que fue azul mucho antes que el fondo del mar.
Azules todas
y cada una de las razones
por las que me quedo
aquí
contigo
entre el azul de tus abrazos
y los míos.
2 comentarios:
es
bonico, jo
Espero que sea tuyo, para poder odiarte aún más de lo que ya lo hago.
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